Para un gran número de profesionales TI su objetivo es el de algún día llegar a Silicon Valley, una de las zonas mas famosas en el mundo tecnológico por ser la sede de muchas de las grandes empresas tecnológicas del mundo.

De acuerdo con estudio divulgado por la plataforma de contratación Hired, los ingenieros de software y diseñadores son de los mejores pagados en la meca de la tecnología, recibiendo un salario anual promedio de 123 mil y 115 mil dólares, respectivamente. El sueldo en pesos de estas profesiones llega los 2.2 millones y 2.1 millones de pesos al tipo de cambio actual.

El salario anual de un ingeniero de software en el Área de la Bahía de San Francisco es 16 veces mayor a lo que gana un profesionista con la misma carrera en México, de acuerdo con el Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco) que señala una paga en promedio de 141 mil pesos por año.

Por otra parte, el salario anual de los diseñadores en la capital de la innovación es 20 veces más grande que los 105,000 pesos que reciben en México. Las cifras pueden parecer escandalosamente altas (lo son) pero hay que tener en cuenta varios factores.

Lo primero es que hay una importante escasez de talento. No es fácil encontrar ingenieros y programadores en EU., las visas para traer trabajadores extranjeros son limitadas y hay un gran incentivo económico en crear tu propiastart-up en lugar de ir a trabajar para alguien ya establecido. Incluso si te va mal, es probable que alguno de los grandes acabe comprando tu empresa precisamente para adquirir el equipo humano.

Lo segundo es que el coste de la vida en San Francisco y Silicon Valley puede llegar a ser muy alto. El alquiler de un estudio puede superar los dos mil dólares en ciertas zonas de la ciudad. Es por esto que muchas de las empresas ofrecen bonus limitados a pagar alquileres y alojamientos. No deja de ser parte de la retribución, pero no es exactamente lo mismo que tener ese dinero en la cuenta todos los meses para gastos personales.

Lo tercero es que las cantidades son antes de impuestos y los impuestos, una vez se sumen los federales y los estatales, pueden llegar a rozar el 30% del salario bruto.