Por José Antonio Ramírez González
El outsourcing o subcontratación de personal, esquema que diversos especialistas consideran que contribuye en la formalización del empleo, creció 4.8% en 2014 lo que significó que en ese período el promedio de trabajadores registrados en esta modalidad ante el Instituto Mexicano del Seguro Social totalizó 144 mil 174 trabajadores, según un reporte de la Asociación Mexicana de Empresas de Capital Humano (AMECH).
Sin embargo, dicho total representó apenas el 0.28% de la Población Económicamente Activa (PEA) con todo y que el outsourcing o subcontratación de personal fue reconocida en la Ley Federal del Trabajo en la reforma laboral de 2012 y a que durante dos años (2012-2013) las empresas de tercerización tuvieron por tener dudas para utilizar este esquema de contratación por temor a ser multadas.
Incluso durante esos dos años fue tal la discusión que se propagó que hubo momentos que se generó mucha confusión y erróneamente se “etiquetó” a organizaciones de outsourcing formales y que cumplían con la legislación laboral con aquellas que desistían de la misma e incurrían en la informalidad, como no pagar bien a sus colaboradores y evadir algunas obligaciones como las de tipo fiscal entre otros rubros, indica Mónica Flores Barragán, directora general de Manpower Group México.
Señala que la mala percepción que aún se tiene de las empresas de outsourcing se debe a la falta de información y a que “nos falta mayor incidencia en lo que la gente sabe de lo que en realidad es el outsourcing o la subcontratación y, desde luego, que sepa a bien distinguir lo bueno del malo”.
Lamenta que en nuestro país siga habiendo varias empresas evasoras que eluden cumplir con el pago de impuestos y, sobre todo, atentan contra los derechos de los trabajadores. “No existe un registro oficial de empresas dedicadas al outsourcing, pero se estima que hay entre 600 y mil 200, de las cuales varias de ellas no están registradas”.
Algunas recomendaciones
Agrega que en su caso como el del grueso de las organizaciones afiliadas a la AMECH, entre las que figuran Adecco, Randstad, Kelly Services y otras, lo que se hace con las personas que buscan alguna plaza laboral es recomendarles que se informen y analicen bien el tipo de empresa que los va a contratar.
Además, “si te ofrecen diez mil pesos por trabajar dos horas al día, tener mucha precaución. Lamentablemente aún hay muchas personas que traen este tipo de ofertas engañosas y lo mejor es tener cuidado, es importante revisar la hoja del IMSS. Si te dijeron que vas a ganar 10 mil o 15 mil pesos, eso tiene que registrarse en el documento que acredita la vigencia de derechos de los servicios médicos del IMSS”.
En ocasiones algunas personas no revisan y no se dieron cuenta que los dieron de alta con salarios muy inferiores a los ofrecidos originalmente antes de ser contratados. De igual modo es relevante quitar el estigma de lo que es un empleo digno y el trabajo de por vida. “Nadie te garantiza que si firmas un documento que dice ´contrato por tiempo indefinido’ vas a trabajar en condiciones dignas, que tendrás un sueldo acorde al mercado y que gozarás de un gran desarrollo personal”, agrega.
Para tomar nota
Flores puntualiza que si en verdad al profesional de TI le interesa ser contratado en una empresa de outsourcing o de tercerización, debe cerciorarse que la misma opere de manera formal, que respeta y cumple con las obligaciones fiscales y laborales; además de que acata con los pagos de seguridad social al IMSS y al INFONAVIT.
La AMECH, por su parte, puntualiza otros rubros que el profesional debe tomar en cuenta como el hecho de que la empresa debe respetarle su salario real al darlo de alta en el IMSS y pagarle íntegramente sus contribuciones durante toda la duración de la relación laboral. Del mismo modo, recibir las prestaciones que marcan la ley, incluso, superiores siempre que así se lo haya ofrecido la empresa contratante.
Para la AMECH, una empresa de outsourcing seria y formal también sabe distinguirse por brindar oportunidades para los recién egresados de las universidades e institutos de educación superior, lo mismo que para adultos mayores y personas con discapacidad.
Lo anterior –concluye la AMECH- promueve el empleo productivo, elegido libremente en condiciones de trabajo decente y aumenta el nivel de la formación profesional y readaptación profesional.
El autor, José Antonio Ramírez, es periodista especializado en TIC y negocios desde hace más de 20 años, además se ha desempeñado como editor de publicaciones especializadas como Byte, LANTimes e Interoffice, así como secciones en diversos diarios.
En la rama de TI es muy común que te paguen por Honorarios, por Asimilados a Salarios, o Mixto, es decir te paguen una parte por Salarios, menos de 3 salarios mínimos, y la otra con otro esquema, como «Monedero Electrónico». Esto es un doble o triple robo, por una parte no sólo afecta el monto de los impuestos, sino la cotización ante el IMSS, Infonavit, AFORE,incluso aún alcanza «Subsidio al empleo». Cuando eres novato, (recién egresado y menor de 30 años), no importan mucho las condiciones, sin embargo, después de esa edad y ya con experiencia, no se debe dejar a la ligera algo tan importante.