Por: José Antonio Ramírez González.
Derivado de la Reforma a la Ley Federal del Trabajo del 30 de noviembre de 2012 el empleo bajo el régimen de outsourcing (tercerización o subcontratación) ya está reconocido y regulado en México. Si bien esta práctica fue aceptada años atrás, hoy la citada legislación la reconoce por promover e incentivar el empleo productivo.
A través de este proceso, una persona física o moral, sin importar su giro y tamaño, delega los procesos de administración de personal a un tercero.
Bajo este esquema la empresa de outsourcing contrata al profesional y le brinda los beneficios de dicha contratación e incluso, pertenecer a una nómina; de esta forma se le sostiene durante un período de tiempo y una vez que demostró capacidad en sus funciones en ocasiones es posible que se le contrate formalmente dentro de la organización cliente, siempre y cuando se abra la vacante correspondiente.
Diversas organizaciones del sector de las TI en México como SAP lo aplican de manera frecuente al manejarlo como una opción de contratación, esto es dependiendo del área y plaza que se requiera, según Elsa Aguilar, directora de Recursos Humanos, SAP Norte de Latinoamérica.
En organizaciones miembros de la Asociación Mexicana de Empresas de Capital Humano (AMECH), el 25% de los empleados que se contratan bajo este esquema logran ser contratados por las empresas que usan la tercerización de personal.
Este procedimiento hace que los empresarios ingresen en las filas de sus organizaciones a colaboradores que ya han probado y verificado que aprendieron los procedimientos necesarios para realizar adecuadamente sus tareas, pero ahora contratados directamente en la empresa.
Al mismo tiempo también se señala que este esquema de contratación incrementa considerablemente la competitividad de las personas en los puestos que desempeñan, sin dejar a un lado como ya se mencionó la legalidad y la formalidad de los empleos, la protección y el pago de las contribuciones al Gobierno.
Al respecto, cifras de la Confederación Internacional de Agencias Privadas de Empleo (CIETT), de la que forma parte la AMECH, señalan que el 68% de candidatos subcontratados para puestos temporales a nivel mundial en promedio, lograr ser contratados formalmente en el largo plazo.
Más de 137 mil contratados bajo el esquema de outsourcing
Actualmente el sueldo promedio mensual en empleos temporales y permanentes tercerizados por las empresas asociadas a la AMECH (pertenecientes a una diversidad de giros y actividades) mostró un repunte al cierre de 2013 al colocarse en 9 mil 297 pesos mensuales, superior a los 7 mil 730 pesos mensuales de 2012.
En lo relativo a puestos medios y de alta dirección a través de la subcontratación realizada por las empresas agrupadas en la citada asociación, el sueldo promedio mensual para dichos niveles se ubicó en 58 mil 051 pesos.
Al cierre de 2013, las empresas asociadas a la AMECH reportaron 137 mil 536 empleos bajo este esquema, lo cual representó un incremento del 3% anual en las aportaciones al IMSS con cifras que superaron los 250 millones de pesos tan sólo en el segundo semestre de 2013.
De acuerdo al Instituto de Investigaciones Jurídicas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), en su investigación «Subcontratación: Un fenómeno global», en México existen entre 2.4 y 4 millones de trabajadores bajo el esquema de outsourcing y su mercado vale cerca de 700 millones de dólares.
La misma investigación retoma otros datos en los que contabilizan que aproximadamente 10% de los trabajadores en México están bajo esta figura, aunque esta cifra podría elevarse de manera importante en los siguientes meses.
Pese a tales avances, Armando Leñero, presidente de la AMECH, indicó que aún se percibe un comportamiento cauteloso para el primer semestre de 2014 para la generación de nuevas plazas de este tipo, por parte de los empleadores en México. En buena medida se debe, puntualizó, a que están valorando el impacto real de las reformas laborales y fiscales emprendidas por la actual administración gubernamental, principalmente por las segundas.
El autor, José Antonio Ramírez, es periodista especializado en TIC y negocios desde hace más de 20 años, además se ha desempeñado como editor de publicaciones especializadas como Byte, LANTimes e Interoffice, así como secciones en diversos diarios.