Sin duda en el sector de las Tecnologías de la Información existe mucha movilidad de empleados, esto debido a las diversas oportunidades de desarrollo profesional que ofrece, por ello es común que en ocasiones se considere de manera seria cambiar de trabajo, una de las principales razones, sin duda, es el beneficio económico, sobre todo si otra compañía ofrece mejores condiciones de sueldo o posibilidades de ascenso.

Cualquier cambio implica un análisis previo, para así conocer las ventajas y desventajas, para tomar la mejor decisión en tu carrera. En cualquier caso lo más importante es definir por qué y para qué quieres obtener un nuevo empleo.

De acuerdo a una investigación elaborada por Boris Groysberg y Robin Abrahams, publicada en Harvard Business Review, en dicha situación debes considerar algunas situaciones, para tomar en cuenta el cambio de trabajo, sin arrepentirte:

• Investiga la situación de tu nueva empresa. Groysberg afirma que generalmente las personas interesadas en conseguir un nuevo empleo no evalúan detenidamente la situación financiera de su posible futura compañía, así como tampoco las posibilidades que tienen de encajar en la misma.
• Pensar en el futuro. Se debe considerar que mantener una perspectiva a muy corto plazo puede hacernos dar un paso en falso en nuestra trayectoria profesional. En estos casos, una adecuada gestión de nuestra carrera se convierte en un elemento imprescindible para conseguir el éxito. Además, cuando se encuentra un nuevo trabajo es muy importante dejar tendidos puentes con la anterior empresa.

Algunas cuestiones que son ajenas al empleado, que no forman parte del estudio, son:

• Crecimiento profesional. Si el actual empleo no lo deja avanzar hacia sus metas ni le ofrece perspectivas a corto, mediano o  largo plazo, es mejor cambiar a otro empleo que le ponga en un camino más claro.
• Movimientos en la organización. Si existen cambios en la estructura organizacional donde se observe despidos masivos de personal, es mejor considerar la opción de otro empleo.
• Crisis financiera de la empresa. Si la compañía está pasando por serios o graves problemas económicos y puede observarse en el horizonte un probable cierre o quiebra, es mejor aceptar otro empleo.
• Contraoferta. Ante esta situación es necesario revisar los motivos que te llevaron a renunciar. Si son válidos, debes continuar con tu plan de acción y rechazar en forma educada. En todo momento debes manejarte con profesionalidad. Las renuncias pueden provocar resentimientos, pero nunca cierres las puertas, ya que puedes requerir de la empresa más adelante.

La cuestión más importante a considerar, de acuerdo a los expertos es cómo te sientes dentro de la organización y si va acorde a tus objetivos de vida, así como tu desarrollo profesional el permanecer en cierta empresa, siempre se trata de un enfoque más personal y profundo.