Los análisis de tendencias son un buen recurso para los profesionales TI, ya que les permite conocer cuáles serán las tecnologías y conocimientos que vendrán los próximos años. Si bien es algo complicado saber el futuro, los analistas de Gartner es algo que realizan desde hace años y sus aproximaciones suelen estar muy cercanos a la realidad.
Con motivo de la celebración del ITxpo 2017 en Orlando, Florida, la consultora ha publicado una lista con las 10 tendencias tecnológicas más relevantes para 2018. Así, las empresas que sepan incorporar las mismas en sus procesos, tienen mucho que ganar en sus procesos de transformación digital.
La evolución del software, entendido como la parte lógica de los sistemas TIC y por lo tanto incluyendo programas, apps, servicios, etcétera, se producirá al ser dotado de un cierto nivel de inteligencia. Y esto no se refiere exclusivamente a aquellos desarrollos en los que la IA es imprescindible. También se plantearán otros usos más “ligeros” de la misma, pero que servirá para que los usuarios vean facilitadas sus operaciones.
Así, seguramente estaremos entrando en un nuevo escenario en el que la Inteligencia Artificial, en este contexto, se situará en un plano intermedio entre las funciones del software y el usuario, no solo anticipándose a aquello que el usuario ya “sabe” que quiere hacer, sino también proponiéndoles acciones que éste podría no haber contemplado todavía, pero que pueden resultarle útiles e interesantes.
En 2018 se confirmará una tendencia que se prolongará, como mínimo, hasta 2020, y que va a establecer el sustrato de cómo serán las empresas del futuro. Hablamos de la puesta en marcha de los primeros sistemas capaces de aprender, adaptarse y actuar de forma autónoma. Y es que los pasos que se den entre 2018 y 2020 serán determinantes para la reinvención del modelo tecnológico que, según las previsiones, habrá llegado de forma masiva en 2025.
Lo más complicado es que, claro, hablamos de una tecnología que todavía está evolucionando de una manera efervescente, por lo que es necesario afinar mucho en las elecciones que hagamos hoy, puesto que estamos, por así decirlo, plantando los cimientos de una construcción que se prologará durante años, y de la que dependerá muy directamente el desarrollo de nuestras actividades.
La nube con computación en el extremo es otro concepto que puede resultar un poco complejo de entender. Para evitarlo, es imprescindible tener claro que, aunque se tiende a pensar lo contrario, Cloud no es necesariamente sinónimo de modelo centralizado. Es decir, que una solución en la nube puede tener elementos radicados en el centro de la infraestructura, claro, pero que otra parte de los mismos puede estar repartida por los diversos nodos que acceden al servicio. Es más, no es solo que computación en la nube e inteligencia en el extremo no sean excluyentes, es que, muy al contrario, son perfectamente complementarios.
Así, un modelo Cloud con una gran inteligencia centralizada en el data center, pero con capacidad de computación en el extremo, y que por lo tanto sea flexible ante problemas de conectividad, latencias excesivas, redes saturadas, etcétera, es el que, según la consultora, va a empezar a ganar peso a partir de 2018. Sí es cierto, no obstante, que este paradigma depende mucho de la evolución de las cosas inteligentes (así como de determinadas soluciones de computación en el extremo), lo que tardemos en empezar a ver esa combinación tan sorprendente, a priori, como interesante y prometedora.
Hasta hace poco tiempo, lo digital se enmarcaba entre los cuatro bordes de las pantallas con la que interactuábamos con el teclado y el ratón. Y lo mismo se puede decir de la Realidad Virtual, una simulación que transcurría de manera totalmente segregada del entorno real. Sin embargo, la llegada de la Realidad Aumentada supuso un primer punto de ruptura en la estanqueidad de ambos mundos (real y digital), y sirvió para demostrar que, de la combinación de ambos, pueden surgir experiencias más enriquecedoras, sistemas de interacción más sencillos, etcétera.
La Realidad Combinada es la evolución natural de la Realidad Aumentada, e incorpora la Realidad Virtual al conjunto de tecnologías y sistemas que emplea para generar experiencias de uso, con distintos fines, que resulten lo más inmersivas y creíbles posibles. Y es un cambio muy relevante puesto que, según Gartner, es el gran salto que necesitaba la Realidad Virtual para dejar de ser vista, por muchos, como una tecnología dirigida exclusivamente al mercado del ocio. Crear espacios de Realidad Combinada (o mixta, como también se la conoce) permitirá probar los efectos positivos que puede tener esta tecnología tanto en entornos de trabajo como, muy especialmente, en el campo de la formación, en análisis, las ciencias, etcétera.