Hoy, el 80% de las empresas invierten en Inteligencia Artificial (IA), pero solo uno de cada tres líderes empresariales cree que su compañía deberá aumentar la inversión en los próximos 36 meses para evitar quedar rezagados en relación a otras empresas. Al mismo tiempo, las organizaciones consideran que habrá dificultades significativas para adoptar estas tecnologías y estudian una estrategia para hacer frente a esos problemas: la creación de un nuevo puesto directivo, el Director de IA (CAIO, Chief AI Officer) responsable de agilizar y coordinar la adopción de IA.

Estos resultados provienen de una encuesta realizada a 260 grandes organizaciones que operan globalmente. El estudio fue efectuado por Vanson Bourne, la empresa líder en investigación de mercado de la industria tecnológica, en representación de Teradata (NYSE: TDC), la empresa líder en soluciones analíticas.

“Existe  una tendencia importante que se desprende de este informe: hoy, las empresas consideran la IA como una prioridad estratégica que les ayudará a superar a sus competidores en sus respectivas industrias”, explicó Atif Kureishy, Vicepresidente de Prácticas Emergentes en Think Big Analytics, una compañía de Teradata. “Pero para aprovechar todo el potencial de esta tecnología y obtener el máximo retorno sobre la inversión (ROI), estas empresas deberán modernizar sus estrategias fundamentales de modo que la IA tenga un papel bien integrado, desde el centro de datos hasta la sala de reuniones de los ejecutivos tomadores de decisión”.

Los resultados de la encuesta muestran que las empresas son optimistas y esperan que sus inversiones en IA rindan sus frutos.

Los sectores en los que los encuestados esperan ver el mayor impacto de la IA son las empresas de tecnología de la información y telecomunicaciones con un 59%; servicios profesionales y empresariales con 43%; y los servicios a clientes y servicios financieros empataron en tercer lugar con 32%.

Los tres retos más importantes para la IA, en los que las compañías esperan que estas tecnologías generen mayores ingresos son la innovación/investigación y desarrollo de productos con el 50%; la atención al cliente con 46%; y la cadena de suministro y operaciones con 42%. Esto refleja algunas de las áreas con mayor inversión en IA, entre las que se encuentran la experiencia del cliente con 62%, la innovación de productos con 59% y la excelencia operativa con 55%.

Casi todos los encuestados consideran que habrá problemas en la adopción de la IA y su ROI, como sucede con casi todas las tecnologías emergentes. Las compañías quieren continuar invirtiendo en IA, probablemente por las ganancias que los ejecutivos y los responsables de las decisiones de TI esperan obtener por ahorros de tiempo y costos, pero la falta de infraestructura de TI y de personal capacitado destacan como las dificultades más importantes. Sorprendentemente, los líderes de negocios no están tan preocupados por el impacto que la IA y la automatización tendrán en los empleados —sólo el 20% lo ve como un problema— y en menor medida, 19%, están preocupados por plantear un caso de negocio para la IA.

Si bien los ejecutivos actualmente recurren a los directores de tecnología existentes (como los CIO y los CTO) para dirigir la adopción de inteligencia artificial y su aplicación, consideran que en el futuro la IA será tan importante en la formulación de estrategias para todas las prácticas empresariales que necesitarán un CAIO, es decir, director de IA, para coordinar y dirigir su implementación en toda la organización.

Durante los últimos años, las empresas tecnológicas han asegurado que la Inteligencia Artificial es una estrategia de negocio y una solución robusta, y esta encuesta demuestra que hoy las compañías están obteniendo los beneficios de incorporar IA.

“A medida que seguimos adoptando soluciones de IA en nuestro negocio, encontramos que es un diferenciador probado para crear oportunidades que agilicen nuestras operaciones y aumenten los ingresos”, afirmó Nadeem Gulzar, Director de Analíticas Globales de Danske Bank.  “Encontrar el talento adecuado siempre es un desafío en cualquier campo tecnológico emergente, y tener opciones basadas en servicios, junto con las soluciones existentes, será fundamental para librar la brecha a medida que continuemos invirtiendo en esta tecnología”.

Las empresas creen que la IA será una tecnología con larga vida útil, y planean duplicar su inversión en los próximos cinco años, y triplicarla en 10 años. Pero para maximizar el ROI, saben que deben repensar cómo esta tecnología va a alterar todos los aspectos de su negocio y crear una estrategia ágil y adecuada para obtener el ROI.