Según un nuevo informe de TEKsystems, los programadores generan más valor a las empresas que sus responsables de TI. El informe también señaló cómo se está ralentizando la implementación de nuevas tecnologías tales como la Inteligencia Artificial, el Internet de las Cosas y la Realidad Aumentada/Virtual.
Como cada año la multinacional de servicios de TI TEKsystems realiza un informe sobre las tendencias tecnológicas, las expectativas de los directores de TI, y el talento que necesitarán las empresas el próximo año. A finales de 2017 hicieron una encuesta online entre unos mil responsables de departamentos de TI que pertenecen a empresas de todos los tamaños y sectores y están ubicadas en Estados Unidos.
La función departamento de TI dentro de una empresa ha evolucionado de una manera drástica en la última década. De hecho, ha pasado de percibirse como un centro puro de coste a ser considerado una parte crítica y transformadora del negocio que ayuda a impulsar la innovación.
La descentralización del departamento de TI, gracias a lo fácil que es para otros departamentos obtener tecnología por sí mismos, ha hecho que los proyectos se muevan fuera del control del departamento de TI, y como consecuencia sus necesidades de personal han cambiado.
Curiosamente, los programadores y desarrolladores encabezan la lista de los roles más críticos que impulsan el éxito empresarial, mientras que los puestos de gestión de TI disminuyen su influencia (en los últimos 3 años no han aparecido entre las 5 posiciones más relevantes).
La principal queja de los responsables de departamento es lo difícil que les resulta encontrar la gente adecuada, lo cual conlleva incumplimiento de plazos, falta de productividad, y mal ambiente en la empresa.
En los dos últimos años los directores de TI han aumentado el número de contrataciones directas, y también han gastado más dinero en formación. Este año prevén además aumentar el número de contrataciones externas.
La realidad es que el talento es la mayor barrera para conseguir el éxito, pues les impide ponerse al día y por lo tanto competir e innovar. Por lo tanto, las organizaciones necesitarán incorporar otros métodos más allá de la contratación tradicional solo.
Debido a la dificultad de encontrar a personal cualificado, actualmente la mayor parte de las empresas se centran en dominar las tecnologías que ya están maduras, es decir, aquellas relacionadas con la seguridad, la nube y las aplicaciones móviles.
Sin embargo, en lo que se refiere a nuevas tecnologías como Internet of Things (IoT), inteligencia artificial (AI), realidad aumentada y virtual (AR / VR) o blockchain, parece que las empresas se lo están tomando con calma en términos de desarrollo. Pocos responsables de TI dijeron que tenían alguna iniciativa planificada para estas tecnologías en 2018.
Mejorar la eficiencia encabezará la lista de objetivos comerciales de TI para 2018, según la encuesta, seguida de la implementación de nuevas aplicaciones e infraestructura y la mejora de las aplicaciones e infraestructura existentes.
Esta es la primera vez que la implementación o mejora de aplicaciones existentes no encabeza la lista, y respalda el hallazgo de que este departamento se vuelve más responsable de mantener las soluciones informáticas establecidas, especialmente en las áreas de seguridad y datos, y menos responsable de las nuevas iniciativas.
La eficiencia se convierte en una prioridad y mejorarla mediante la introducción de nuevas tecnologías, el fortalecimiento infraestructura existente, ajuste interno procesos o reduciendo costes, creará espacio para que la TI aumente su papel en la transformación el negocio.
La transformación que se está produciendo brindará a las organizaciones la oportunidad de utilizar la tecnología como un activo estratégico. Los equipos de TI que sean capaces de formar parte de esta transformación ayudarán a diferenciar a su organización del resto de su competencia. Eso significará identificar áreas para aumentar la eficiencia y agregar un mayor valor a la tecnología.
Y los programadores cada vez tendrán más importancia en todo esto y, por lo tanto, en el éxito de la empresa, por lo que serán puestos cada vez más valorados.