El desarrollo de software sigue siendo una piedra angular de la economía digital global, siendo vital para muchas empresas y servicios.

En agosto, una encuesta remota encontró que el rol del desarrollador de software se considera el trabajo tecnológico más importante del futuro, seguido por los ingenieros de software.

Ya en 2023, varios expertos han compartido sus predicciones sobre algunos de los desarrollos clave que verá el sector de desarrollo de software en 2023.

Despega la programación asistida por Inteligencia Artificial

Durante varios años, las herramientas han estado disponibles para ayudar a escribir código fuente utilizando IA. Pero ahora estamos en un momento decisivo, gracias a la introducción durante el año pasado de una nueva generación de herramientas de codificación asistida por IA como GitHub Copilot y Amazon CodeWhisperer.

En 2023, se espera ver más y más desarrolladores experimentando con código generado por IA. Aún no estamos seguros de que la programación asistida por IA madure hasta el punto de que estas herramientas se conviertan en una parte cotidiana de los flujos de trabajo de la mayoría de los desarrolladores para fines de 2023, pero creo que más codificadores al menos jugarán con las herramientas y usándolos ocasionalmente para generar código relativamente mundano.

Reducción del desarrollo de criptomonedas y blockchain

Se predijo que a fines de 2021 el desarrollo de aplicaciones y plataformas de blockchain seguiría siendo marginal en 2022. Los líderes indican que para este año el desarrollo con blockchain podría desmeronarse.

Entonces, si eres es uno de los pocos desarrolladores que intenta especializarse en la creación de aplicaciones de blockchain, sería ideal que encontraras un nuevo nicho. El interés por blockchain se está desvaneciendo; además, la originalidad de las aplicaciones basadas en esta tecnología se deriva más de su arquitectura que de la lógica del software con el que interactúa blockchain.

La programación Low-Code se vuelve menos comentada

Al igual que la exageración que rodea a las criptomonedas, es probable que la energía que rodea a la programación de código bajo se mantenga durante el próximo año.

Esto no se debe a que la programación de código bajo vaya a desaparecer. Ha existido durante mucho tiempo y aún existen buenas razones para aprovechar las soluciones de código bajo en la actualidad.

Pero es porbable, que en general, más desarrolladores estén reconociendo las limitaciones de las herramientas de código bajo. El low-code presenta algunos desafíos de seguridad únicos, por ejemplo, y no siempre produce las aplicaciones de mejor rendimiento o más rentables.

Si ya usas plataformas de código bajo, probablemente continuarás haciéndolo en 2023. Pero la adopción de código bajo se ralentizará a medida que los desarrolladores se den cuenta de que el código bajo tiene sus límites.

Los monolitos se trasladan a contenedores

¿Recuerda cuando los desarrolladores enfrentaron la presión de refactorizar el código de su aplicación para que pudiera ejecutarse como microservicios dentro de contenedores? Esos días han terminado. Por ahora, la mayoría de las aplicaciones que son buenas candidatas para la refactorización ya han sido refactorizadas.

Sin embargo, al mismo tiempo, los desarrolladores continúan enfrentando presiones para migrar aplicaciones a plataformas como Kubernetes y hacer que las aplicaciones sean más independientes del entorno. Para hacer esas cosas, necesitan ejecutar aplicaciones dentro de contenedores.

Por ambas razones, espero que veamos un aumento en la cantidad de aplicaciones monolíticas que se ejecutan dentro de contenedores. Aunque los contenedores se asocian con mayor frecuencia con microservicios, no hay ninguna razón por la que no pueda ejecutar una aplicación monolítica completa dentro de un contenedor, y hacerlo tiene ventajas, como la capacidad de reducir la cantidad de dependencias del entorno externo de las que debe preocuparse. acerca de cuando se implementa la aplicación.

La contratación de desarrolladores de software se ralentiza

Durante años, los desarrolladores de software han tenido una posición envidiable en el mercado laboral. Las empresas estaban desesperadas por contratar programadores y estaban dispuestas a pagar salarios bastante buenos para contratarlos y retenerlos.

Hay pocas razones para creer que esa tendencia haya cambiado. Los desarrolladores todavía parecen conseguir trabajos con facilidad.

La desaceleración económica general que tuvo lugar durante el año pasado (y que afectó especialmente a la industria tecnológica), combinada con grandes despidos y salidas en las principales empresas tecnológicas en últimos meses, es probable que resulte en una perspectiva del mercado laboral algo menos halagüeña para los desarrolladores.

En 2023, los buenos desarrolladores aún podrán encontrar buenos trabajos, pero es posible que no puedan elegirlos como lo hicieron en años anteriores. Y algunos desarrolladores «sobreempleados» pueden tener que conformarse con hacer un solo trabajo a la vez.

imagen: @snowing