Debido a la demanda de servicios digitales, las empresas aceleraron sus esfuerzos de transformación digital, al hacer que sus operaciones sean más ágiles y productivas que nunca. Esta evolución fue clave para la supervivencia empresarial con un año tan complicado como fue el 2020.
El 12º Informe anual de tendencias tecnológicas de Deloitte ahonda en estas estrategias y tecnologías que tienen un efecto dominó causado por la pandemia de COVID-19. ¿Cómo afrontaron las organizaciones los cambios del 2020?
Cada año, la firma multinacional de servicios profesionales y contables analiza cómo las empresas están (y deberían estar) acelerando los esfuerzos de transformación digital. Se identifican nueve tendencias, las cuales probablemente transformarán el negocio en los próximos 18-24 meses.
Las tendencias que identifica Deloitte son:
- Estrategia, diseñada: a medida que la estrategia empresarial y tecnológica se vuelven cada vez más inseparables, las opciones tecnológicas desempeñan un papel más importante a la hora de habilitar, o potencialmente limitar, la estrategia organizativa.
- Reactivación del núcleo: los altos directivos comienzan a poner más atención a la modernización de la tecnología como un imperativo para permitir un cambio estratégico, los líderes TI pioneros adoptarán nuevos enfoques, tecnologías y casos comerciales para revitalizar los activos principales.
- Suministro desencadenado: las empresas pioneras están utilizando tecnologías digitales avanzadas, datos virtualizados y cobots para transformar los centros de costos de la cadena de suministro en redes de generación de valor centradas en el cliente.
- Lo digital se une a lo físico: obligadas a adoptar lo digital más rápido que nunca, las organizaciones reconocen que la experiencia humana deseada logra un equilibrio entre hacer las experiencias humanas físicas tradicionales sean más digitales y las experiencias digitales más físicas.
- Reiniciar el lugar de trabajo digital: esto representa un cambio fundamental en la forma en que se realiza el trabajo. Las organizaciones adoptan la tecnología para optimizar la productividad individual y del equipo, la colaboración y la experiencia de los empleados en general.
- Herramientas para la equidad: las organizaciones tienen acceso a herramientas cada vez más sofisticadas para respaldar sus iniciativas de diversidad, equidad e inclusión a lo largo del ciclo de vida del talento. Las herramientas buscan hacer que la toma de decisiones y los procesos de DEI estén más basados en datos.
- Inteligencia Artificial industrializada: la era de la IA artesanal debe dar paso a los MLOps, la aplicación de la disciplina de la ingeniería para automatizar el desarrollo, el mantenimiento y la entrega del modelo Machine Learning, para acortar los ciclos de vida del desarrollo e industrializar la IA.
- Revolución de datos de máquinas: Para lograr los beneficios y la escala de IA y MLOps, los datos deben ajustarse para el consumo de máquinas nativas, no para los humanos, lo que hace que las organizaciones reconsideren la gestión, captura y organización de datos.
- Confianza cero: una postura de ciberseguridad de confianza cero brinda la oportunidad de crear una seguridad más sólida y resistente, simplificar la gestión de la seguridad, mejorar la experiencia del usuario final y habilitar prácticas de TI modernas.
Los gobiernos y las organizaciones con visión de futuro comprenden las fuerzas tecnológicas que los rodean y buscan formas de aprovecharlas en beneficio de los clientes y los ciudadanos por igual. Aquí puedes consultar el informe completo.
imagen: Maxim Hopman